martes, 28 de noviembre de 2023

🎵QUE VIVA ESPAÑA.......🎵

Son las 19 horas de un domingo otoñal, las nubes son negras y de vez en cuando caen algunas gotas frías que te invitan a resguardarte en algún alero de un portal. El pueblo está vacío, por momentos ves pasar algunos patinetes eléctricos con malabaristas conductores al manillar (por supuesto sin casco, saltándose las normas de tráfico y posiblemente sin seguro). Te imaginas un pueblo de unos 40.000 habitantes completamente deshabitado al menos en sus calles, bares y restaurantes completamente cerrados, las persianas de los escaparates bajadas, un silencio sepulcral que te obliga a reflexionar que está ocurriendo en infinidad de pueblos cuyas sombras son velos y chilabas.

No me considero racista, al menos con aquellos que cumplen con sus obligaciones, respeto y normativas ciudadanas del país que han elegido para vivir cómo válvula de escape a un oriundo terruño que, seguro que desean volver cuando su situación se lo permita.

La variedad de poblaciones que son obligadas a recogerlos están en Cataluña, Ceuta, Melilla, Isla Canarias, Almería y algunas del centro de España que acogen por falta de mano de obra. La convivencia no es fácil, la mayoría viven de ayudas, aunque no todos poseen los papeles en regla y además están obligadas a conocer y aprender el idioma propio de la comunidad que los ha recogido antes que el español. 

Observas que algunos jóvenes son emprendedores y se posicionan en abrir negocios en los cuales ves a uno trabajando y cinco mirando, eso da que pensar, pues los móviles y vehículos que utilizan son de alta gama, eso supone que algo hay detrás de los espejos de las peluquerías que son las que más abundan. Me imagino que piensas en que puede haber detrás de todo esto. Hasta la Policía Local nos advierte que es más precavido no pasear por las calles céntricas a partir de las veinte horas.

A los mayores, los ves que pasan toda la mañana sentados en las terrazas con un café cortado y un vaso de agua, y los jóvenes en edad escolar pasean en grupos sin saber su trayecto y su destino. Es curioso verlos en los gimnasios, cargando los móviles en las farolas, en los trenes de cercanías desplazándose sin pago alguno de billete y en las colas de los Kebab, para saciar sus necesidades culinarias.

Hoy existe un overbooking de migrantes muy superior a nuestras necesidades, tanto de mano de obra, como de acogimientos por "humanidad"; principalmente magrebíes, cuya convivencia es muy difícil de conllevar por varias razones: cultura, religión, idiosincrasia diferente, cuyos movimientos inadecuados se producen por falta de entendimiento entre naciones y propuestas mal enfocadas.

Es imposible comprender que en España con 2.700.000 parados, no tengamos mano de obra para recoger las aceitunas de las montaneras de Andalucía y tampoco la fresa y otras frutas. Esas importantes recogidas tenemos que hacerlas a través de mano de obra importada. 

Todos los problemas de migrantes que superan nuestros porcentajes de paro interno y un deplorable acoso de cayucos que amerizan en nuestras costas o son recogidos por humanidad por nuestros cuerpos policiales, son un gasto enorme para todos los españoles. ¿Por que vienen a España?, está muy claro, tienen que ir a países cercanos donde la facilidad de entrada y supervivencia desestimada en su hábitat por falta de recursos propios nos los envían, y nosotros los acogemos sin ningún miramiento y según dicen ahora por "humanidad".

Solo hay una forma que se evite este gran problema existente, invertir en su propio país como lo han hecho las industrias privadas españolas del Textil, Sector del Automóvil y Componentes, cuya implantación ha supuesto para ellos importantes puestos de trabajo y para la industria privada española grandes beneficios. 

Ya hemos perdido la Industria de Fosfatos, cuyo contenido en uranio le viene muy bien a USA, del cual Marruecos dispone del 75% de la existencia mundial, el Sahara, varios acuerdos de pesca y seguimos soportando la falta de soluciones eficientes por mantener unas relaciones con un reinado huraño con su propio pueblo y lejos de mantener acuerdos por la falta de comunicación y negociación de una España que ha perdido su postura ante un País fronterizo con mucho futuro.

Saludos

Miguel Sánchez del Río González-Anleo