Las noticias se emiten en los medios de comunicación de tal forma que, cada día, nos confunden con sus planteamientos. No las presentan separadas, ni tituladas, salvo los deportes y el tiempo. Todas las demás se mezclan en un batiburrillo que si distraes la vista por unos instantes no sabes si están hablando del Gobierno o de un Sunami en Tailandia. Eso si, la figura, la estética y el aspecto de quien lo expresa te atrae en algunas ocasiones más que la propia noticia, para no caer en ese ego, es necesario tener destreza para comunicar de forma certera, clara y distendida.
Las noticias al no tener una solución rápida de aquellas que lo requieren, son repetidas constantemente que, los presentadores, parecen loros en una jaula repitiendo siempre las mismas frases y los mismos vocablos. Además incluyen leyendas diminutas, y se repiten a tal velocidad que dificultan su lectura y pérdida de atención a lo que están hablando en el área superior de la pantalla. Desconozco quien planifica los programas e informativos, pero creo que ignoran quien son los clientes, pero es fácil de adivinar, los clientes somos los televidentes a los cuales se les engaña muy a menudo con informaciones sin sentido, repetitivas y sin gran interés. Cabe destacar que todo se está desplazando hacia la clase PREMIUM, dejando sólo como interesante los anuncios, incluso en vocablos de los presentadores, cuyo impacto en cuanto al aumento de volumen y repetición de productos comerciales que no son asequibles a todo el mundo, provocando ira y llenando la cabeza de idioteces que nada tienen de cultura ni de información tanto selectiva como veraz.
Otro tema que me indigna es la moda de los tertulianos en algunos programas que carecen la mayoría de falta de educación, profesionalidad y se creen los sabios y expertos en todos los temas que conlleva la solución del problema. Sean periodistas o no, la mayoría deberían estar limpiando bosques.
La mayoría echamos de menos noticias que realmente preocupan al ciudadano de a pie, divididas por temas según la importancia del momento. También se aprecia la falta de comunicación por personas expertas, conocedoras y con facilidad de expresión, así como con capacidad de solución, cumplimiento, veracidad extrema y tener el poder lógico para llevarlo a cabo.
Ya basta de escuchar a fantoches que están convirtiendo España en una novela rosa que sólo sería creíble en los años 30. Tenemos que romper la baraja y jugar de una vez por todas con elementos dignos y capaces de llevarnos a una comprensión y responsabilidad que nos dirija por el camino recto, verdadero y con destino de esfuerzo y ganas de hacer bien las cosas de una puñetera vez por todas. Ya está bien de repetir lo mismo, tropezar siempre con la misma piedra y hacernos más incrédulos trazando un horizonte incierto a todos los españoles , y cuando digo a todos, no distingo a los varios idealismos que nos caracterizan, pues nada tienen que ver con un presente que necesita el máximo esfuerzo y la máxima responsabilidad en éstos momentos tan cruciales de nuestra historia del tiempo presente. Y va por todos los que están incluidos en las pirámides de población: estable, progresista, regresiva y también por los migrantes, los cuales deben adaptarse, cumplir y aceptar todas las condiciones e idiosincrasia de nuestro País.
Saludos
Miguel Sánchez del Río González-Anleo
No hay comentarios:
Publicar un comentario